1
|
CAPILLA
|
DE NTRA.
SRA. DE LA GRANADA
|
31
|
ALTAR
|
DEL
CONSUELO
|
|
2
|
PUERTA
|
DEL
LAGARTO
|
32
|
ALTAR
|
DEL ANGEL
DE LA GUARDA
|
|
3
|
PUERTA
|
DE LA
CONCEPCION
|
33
|
CAPILLA
|
DE SAN
ISIDORO
|
|
4
|
PUERTA
|
DEL BAUTISMO
|
33-1
|
ALTAR
|
DE NUESTRA
SEÑORA DE LA CINTA
|
|
5
|
PUERTA
|
DE LA
ASUNCION
|
33-2
|
ALTAR
|
DE LA
VIRGEN DEL MADROÑO
|
|
6
|
PUERTA
|
DEL
NACIMIENTO O SAN MIGUEL
|
34
|
ALTAR
|
DEL
NACIMIENTO
|
|
7
|
PUERTA
|
DEL
PRINCIPE O SAN CRISTOBAL
|
35
|
CAPILLA
|
DE SAN
LAUREANO
|
|
8
|
PUERTA
|
DE LAS
CAMPANILLAS
|
36
|
CAPILLA
|
DE SANTA ANA O CRISTO DE MARACAIBO
|
|
9
|
PUERTA
|
DE LOS
PALOS
|
37
|
CAPILLA
|
DE SAN
JOSE
|
|
10
|
CAPILLA
|
MAYOR
|
38
|
CAPILLA
|
DE SAN
HERMENEGILDO
|
|
11
|
CRUCERO
|
39
|
CAPILLA
|
DE LA
ANTIGUA
|
||
12
|
CORO
|
40
|
ALTAR
|
DE LA
CONCEPCIÓN O DE LA GAMBA
|
||
13
|
CAPILLA
|
DE LA
CONCEPCION CHICA
|
41
|
ALTAR
|
DE LA
SANTA CRUZ O DE LA PIEDAD
|
|
14
|
CAPILLA
|
DE LA
ENCARNACION
|
42
|
CAPILLA
|
DE LOS
DOLORES
|
|
15
|
TRASCORO
|
43
|
SACRISTIA
DE LOS CALICES
|
|||
16
|
CAPILLA
|
DE LA
ESTRELLA
|
44
|
CAPILLA
|
DE SAN
ANDRES
|
|
17
|
CAPILLA
|
SAN
GREGORIO
|
45
|
TRÁNSITO A
LA SACRISTIA MAYOR
|
||
18
|
CAPILLA
|
DEL PILAR
|
46
|
SACRISTIA
MAYOR
|
||
19
|
CAPILLA
|
DE LOS
EVANGELISTAS
|
47
|
CAPILLA
|
DEL
MARISCAL
|
|
20
|
CAPILLA
|
DE LAS
DONCELLAS
|
48
|
SALA DE
ORNAMENTOS
|
||
21
|
CAPILLA
|
DE NUESTRA
SEÑORA DE BELEN
|
49
|
ANTECABILDO
|
||
22
|
CAPILLA
|
DE LA
ASUNCION
|
50
|
SALA
CAPITULAR
|
||
23
|
CAPILLA
|
DE SAN
FRANCISCO
|
51
|
ALTAR
|
DE SANTA
JUSTA Y SAN RUFINA
|
|
24
|
CAPILLA
|
SANTIAGO
|
52
|
ALTAR
|
DE SANTA
BÁRBARA
|
|
25
|
CAPILLA
|
DE SCALAS
|
53
|
CAPILLA
|
DE LA
CONCEPCION GRANDE
|
|
26
|
CAPILLA
|
DE SAN
ANTONIO
|
54
|
CAPILLA
|
REAL
|
|
27
|
PORTADA
DEL SAGRARIO
|
55
|
CAPILLA
|
DE SAN
PEDRO
|
||
28
|
CAPILLA
|
DE LOS
JÂCOMES
|
56
|
ALTAR
|
DE LA
ASUNCION
|
|
29
|
ALTAR
|
DE LA
VISITACION
|
57
|
ALTAR
|
DE LA
MAGDALENA
|
|
30
|
CAPILLA
|
DE SAN
LEANDRO
|
58
|
MAUSOLEO
DE CRISTOBAL COLON
|
||
30-1
|
ALTAR
|
DE NUESTRA
SEÑORA DE LA ALCOBILLA
|
59
|
SEPULCRO DE
HERNANDO COLON
|
||
30-2
|
ALTAR
|
DEL NIÑO
MUDO
|
CAPILLAS
DEL LADO SUR
35.-
CAPILLA DE SAN LAUREANO
La particularidad de esta capilla es que
en este lugar se comenzó la construcción de la Catedral, siendo además la
primera capilla que se terminó. En principio estaba destinada para servir de
enterramiento del Patriarca de Constantinopla y arzobispo de Sevilla, Don
Alonso de Egea, del que se conserva la losa con el epitafio y el escudo, al
igual que ocurre con la del canónigo Lampérez que la eligió en el siglo XVIII y
dispuso su ornamentación, sin embargo el que destaca por su volumen es el del
Cardenal Joaquín Lluch y Garriga, sepulcro realizado por Agapito Vallmitjana en
1885. Esta capilla cuenta con una reja de 1702 que guarda un retablo salomónico
de comienzos del XVIII, es de dos cuerpos y remate. Destaca la escultura del
titular, San Laureano, en la hornacina central y tres relieves alusivos a su
vida, cómo la escena de su martirio.
Sus muros y bóveda cuentan con una
decoración pictórica realizada por Lucas Valdés, hoy prácticamente perdida. En
sus muros estan colgados cinco cuadros de principios del XVII de Matías de
Arteaga, que muestran distintos pasajes de la vida del Santo, cómo el Martirio
o San Laureano ante el Papa Virgilio, la Resurrección de un tullido en Roma, la
Resurrección de un joven en Marsella o la Presentación al clero de Sevilla de
la cabeza del Santo, todos ellos de grandes dimensiones.
Sobre la reja una vidriera gótica de 1478
y realizada por Enrique Alemán en la que nos representa a Santa Catalina, Santa
María Magdalena, Santa Marta y Santa Margarita. En el interior otra vidriera
renacentista de Vicente Menardo de 1572, en la que aparece San Laureano entre
San Isidoro y San Leandro.
36.-
CAPILLA DE SANTA ANA
Sobre la reja nos encontramos con una
vidriera de Enrique Alemán de 1479, con la representación de Santa Águeda,
Santa Lucía, Santa Cecilia y Santa Inés. Otra vidriera en el interior de autor
desconocido con la Sagrada Familia
sustituyó a la renacentista de Vicente Menardo de 1797.
En un principio estuvo dedicada a San
Bartolomé, posteriormente a Santa Ana, pero debido a la devoción creada por una
pintura del Cristo de Maracaibo pasó a su actual denominación.
Sobre una tribuna bajo la que se accede a
otras dependencias del Cabildo en las que se hallan unos lienzos de reconocidos
pintores, se halla el retablo de pinturas de los llamados de batea, del último
gótico. Dotado por el canónigo Diego Hernández Marmolejo y el caballero Rui
Barba Marmolejo, contiene catorce tablas de gran interés. En el basamento
añadido en el siglo XIX, se encuentra un lienzo de Santa Ana, la Virgen y el
Niño, de autor desconocido, en el banco podemos apreciar la Flagelación, el
Camino del Calvario, La Crucifixión, el Descendimiento y la Piedad, en el
primer cuerpo a Santiago el Mayor, San Blas, San Bartolomé, San Nicolás y San
Sebastián y en el segundo cuerpo a San Juan Bautista, Santa Ana con la Virgen
Niña, una talla con influencias francesas de la Virgen con el Niño, Santa Marta
y San Miguel y ya a finales del XVIII se traslada la tabla en la que se representaba
al Santo Cristo de Maracaibo, un crucificado que se encontraba junto a la
Puerta de San Miguel. El original se perdió y en el siglo XIX se hizo una copia
que es la que actualmente podemos ver. En 1913 los Condes de Casa Galindo
costearon el retablo del Cristo de Maracaibo, obra de Joaquín Bilbao.
Frente al retablo principal se encuentra
el sepulcro del Cardenal Luís de la Lastra y Cuesta, obre de Ricardo Bellver de
1880.
De sus muros cuelgan pinturas de interés,
la Inmaculada Concepción de Sebastián Llanos de finales del XVII, también de
ese siglo Abraham con los tres ángeles de la escuela flamenca, Cristo servido
por los ángeles, un cuadro de 1625 de grandes dimensiones, atribuido a Jerónimo
Ramírez, en el que se aprecian ciertas influencias de Zurbarán, las Bodas de
Caná del XVII y la Sagrada Familia de 1740 y atribuido a Ruiz Soriano.
37.-
CAPILLA DE SAN JOSÉ
Esta capilla estuvo dedicada a San Blas
en sus inicios, sobre la reja de entrada nos encontramos con una vidriera, muy
deteriorada, de Enrique Alemán de 1479 en la que se representa a los Padres de
la Iglesia, San Gregorio, San Agustín, San Ambrosio y San Jerónimo. En el
interior existe otra en la que se puede distinguir la Adoración de los
Pastores, esta vidriera se realizó en 1932 sustituyendo a la primitiva de la
que se conserva la imagen de San Blas, colocada en el remate de la actual.
El retablo neoclásico es de mármol con
toques de bronce, diseño de Don Pedro Arnal, director de la Academia de San
Fernando, y realizado por Manuel Núñez a finales del XVIII. Presidiendo el conjunto se encuentra una
imagen de San José realizada por José Esteve, San Miguel y San Blas de Alfonso
Bergaz de comienzos del XIX así cómo la de Santa Lucía y Santa Teresa que se
encuentran en la cornisa y en el ático una medalla de la Virgen del Rosario con
Santo Domingo. En el muro del fondo se
encuentra una Dolorosa de candelero y en el de la derecha el sepulcro del
Cardenal Joaquín Tarancón fallecido en 1862, sobre este sepulcro cuelga el
lienzo Juan de Valdés Leal de 1667, los Desposorios de San José y la Virgen.
Otro enterramiento que nos encontramos es el del Cardenal Bueno Monreal.
Otros cuadros que se pueden ver en esta
capilla son, los de Santa Justa y Santa Rufina, de mediados del XVII, el
Sacrificio de Isaac y la Mujer adúltera, la Imposición de la casulla a San
Ildefonso y una serie de los Apóstoles de medio cuerpo. En una de sus esquinas se encuentra una
escultura de Jesús atado a la Columna, de 1668 y parece que realizado por
Francisco Ruiz Gijón.
38.-
CAPILLA DE SAN HERMENEGILDO
Sobre la reja que cierra esta capilla se
encuentra una vidriera de Enrique Alemán de 1478, en la que se representa a
cuatro Santos Obispos no identificados, en la del interior, obra Francisco
Gutiérrez de 1819 aparecen los atributos del Santo titular.
En esta capilla reposan los restos
mortales del Cardenal Cervantes fallecido en 1453, es un sepulcro en forma de
túmulo con la figura del difunto yacente con sus vestiduras pontificales, todo
ello tallado en alabastro, por Lorenzo Mercadante en 1458, así cómo los
relieves del basamento de ángeles que portan el escudo del apellido.
El retablo, obra de Manuel García
Santiago en 1752, alberga en el centro la figura, realizada por su padre unos
años antes, de San Hermenegildo, tallada a tamaño natural en madera estofada y
policromada. A los lados de la mesa del altar hay dos esculturas mas grandes
que el natural que representa a Santiago el Mayor vestido de peregrino y en
madera policromada y la otra de Santiago el Menor es tallada en piedra y policromada,
pudiendo ser de Pedro Millán, es posible que ésta sea la única talla que se
salvó del derrumbe del cimborrio en 1511, ambas son realizadas en el siglo XVI.
Enfrente se encuentra el sepulcro del
Almirante Mayor de Castilla, Don Juan Mate de la Luna, fallecido en 1337,
trasladado a este lugar en 1848.
Algunas de las pinturas que se conservan
son de gran interés, la Inmaculada de Juan de Roelas, una copia de la Virgen de
la Antigua, Santa Engracia y Santa Rufina del siglo XVII de Bernabé de Ayala, las
Bodas de Caná y Salomé con la cabeza del Bautista de la escuela flamenca del
siglo XVII y Santa Liberata de la escuela sevillana del XVIII.
39.-
CAPILLA DE LA VIRGEN DE LA ANTIGUA
Es la capilla más espaciosa de las
capillas menores, por la decisión del Cardenal Diego Hurtado de Mendoza de
situar su enterramiento en ella ya que además la titular, la Virgen de la
Antigua, gozaba de una gran devoción en el primitivo templo, por lo que quería
que fuera la capilla mas suntuosa del templo que aún se estaba construyendo,
para lo cual manda elevar su altura y duplicar su anchura y tener sacristía
propia y se cubre con una bóveda de nervadura del último gótico.
Inicialmente la entrada principal se
situaba en el crucero, contigua al Altar de la Gamba, lugar en el que se
encuentra su portentosa portada, su ornamentación finalizada de 1568 es obra
del escultor Juan López, podemos observar labores platerescas con relieves en
los que se ven escenas del Nacimiento y el Padre Eterno en la parte superior,
así cómo distintas figuras en el intradós del arco. El conjunto es flanqueado
por dos columnas de mármol verde. En la parte superior de las columnas, en la
cornisa, hay dos figuras de San Pedro y San Pablo. La reja que cierra este
acceso es Hernando de Espinosa de 1605.
Cuenta con una reja iniciada en 1530
según su propio diseño por Fray Francisco de Salamanca, aunque no se finalizó
completamente hasta finales del siglo por el rejero granadino Juan López según
el nuevo diseño del arquitecto Hernán Ruiz. La vidriera que ilumina el interior
que hoy vemos es diseño de José Gestoso, en la cual vemos a San Fernando
entronizado, es del siglo XIX y fabricada en Munich, la primitiva era
renacentista y se perdió en el XVIII.
La capilla está presidida por un retablo
de mármol de distintos colores y orden
corintio, donado por el Arzobispo Don Luís de Salcedo y Azcona en 1738,
realizado según diseñó de Pedro Duque Cornejo, por el arquitecto Juan Fernández
de Iglesias. Lo preside la pintura de su titular, una pintura que estaba sobre
un muro de la antigua mezquita, ya cristianizada, en el espacio que hoy ocupa
la reja principal, para lo cual en 1578 el arquitecto Asencio de Maeda decide
trasladar el muro al lugar que hoy ocupa.
Es una pintura al fresco, en la que
aparece la Virgen con el Niño en brazos, de más altura que el natural y con
reminiscencias bizantinas. La Virgen lleva una flor en su mano derecha mientras
sostiene con el otro brazo al Niño que a su vez lleva un pajarito en la mano,
dos ángeles la coronan y un tercero sostiene una filacteria en la que se lee
“Ecce María venit”, en la parte inferior otra figura femenina orante, podría
tratarse de Doña Leonor, esposa de don Fernando de Antequera, según Ceán
Bermúdez. Aunque es una pintura las coronas de orfebrería se añadieron con motivo
de la coronación canónica por el Cardenal Ilundain, el 24 de noviembre de 1929,
promovida por la devoción popular que gozaba, tanto en España cómo en América,
tanto es así que dichas joyas de oro y piedras preciosas las hizo el presbítero
orfebre Granda Builla por suscripción popular.
Sobre el altar se encuentra un crucifijo
de marfil, al finalizar el retablo se estrenaron la baranda de plata del
comulgatorio y las lámparas que peden de los pescantes de bronce, los atriles
de plata donados por Francisco Enríquez de Ribera en 1604 y la araña de plata
de Hernando Ballesteros de finales del XVI.
Los frontales de plata de esta capilla
son muy interesantes, el del altar mayor muestra una cartela central con la
Aparición de la Virgen a San Fernando del siglo XVIII y el de la mesa auxiliar,
algo mas pequeño, es de la mitad del siglo.
En el muro de la izquierda nos
encontramos con el sepulcro del Cardenal Diego Hurtado de Mendoza, encargado
por orden de su hermano el Conde de Tendilla al taller del escultor genovés
Domenico Fancelli, el diseño es un arco de triunfo bajo el que se encuentra
esculpida la figura yacente del Cardenal, en el basamento alternan esculturas
de Santos con relieves de pasajes evangélicos y escudos de armas del difunto.
Frente a este sepulcro se encuentra el
del Arzobispo Don Luís de Salcedo y Azcona, desafortunada copia del anterior.
Decoran los muros veintiuna pinturas todas ellas de Domingo Martínez en 1738,
su temática es diversa, destacan las que hacen alusión al traslado del muro y a
distintos milagros.
Como antes se comentaba esta capilla
cuenta con una amplia sacristía, a la que se accede a través de una puerta de
ébano con incrustaciones de bronce y carey. Esta estancia servía de depósito de
los ricos ornamentos, joyas y cuadros. De estos últimos existen seis pinturas
sobre cobre del siglo XVII que relatan distintos episodios de la vida de la
Virgen, una copia de la Virgen de Belén de Alonso Cano, un San Fernando de
Murillo, una Inmaculada de la escuela sevillana del XVIII, el Niño Jesús
dormido con la Cruz y por último una pintura sobre tabla de Jesús recogiendo
sus vestiduras.
40.-
ALTAR DE LA CONCEPCIÓN
Está situado a continuación de la capilla
de la Antigua, sobre el muro derecho de la Puerta del Príncipe. La reja que
cierra este espacio es renacentista del rejero Juan Méndez y Pedro Delgado del
año 1562. También conocido por el Altar de la Gamba, un término italiano que
significa pierna, refiriéndose a la pierna de Adán que aparece en primer plano
en un atrevido escorzo en la pintura central del retablo, obra del pintor Luís
de Vargas por encargo del donante Don Pedro de Medina y su hijo el Chantre de
la Catedral en 1536.
Consta de ocho pinturas con labores
platerescas que las enmarcan, presidiéndolo una Alegoría de la Inmaculada Concepción
con el Niño Jesús en brazos, como remate de los ascendientes desde Adán y Eva.
Una obra con tintes italianos como consecuencia de lo aprendido en ese país por
el autor. Completan esta serie otros lienzos laterales de San Pedro, San Pablo,
ángeles músicos y una alegoría de la Iglesia en el banco entre el retrato del
Chantre y el escudo de armas de la familia.
41.-
ALTAR DE LA SANTA CRUZ
También conocido como Altar de la Piedad,
está situado en muro izquierdo de la Puerta del Príncipe o San Cristóbal, lo
cierra una reja del XVI. Cuenta con un retablo de pinturas de Pedro Fernández
de Guadalupe de 1527 en el que también colaboró Alejo Fernández. En el espacio
central aparece el tema de la Piedad y se puede observar que las cabezas, todas
ellas magníficas, puede ser la colaboración que prestó Alejo Fernández, al
igual que en el resto de obras.
En el muro lateral podemos admirar una
pintura al fresco de un elegante y bello San Cristóbal, obra que realizara el
romano Antonio Pérez de Alesio en 1584.
42.-
CAPILLA DE LOS DOLORES
Anteriormente estuvo dedicada a Santo
Tomé, cuneta con una reja sobre la que se ve una vidriera de Arnao de Flandes
de 1555 con el Lavatorio de los pies. Otra pequeña de 1931 ilumina el interior,
en ella aparece el escudo del Cardenal Ilundain.
La advocación se la da una escultura de
candelero bellísima de la Virgen de medio cuerpo de Pedro de Mena de la segunda
mitad del XVII.
El retablo barroco del XVIII no es
resaltable, sin embargo, está presidido por un Crucificado del XVI de buena
calidad, aunque está muy restaurado y atribuido a Juan Bautista Vázquez el
Viejo. En las calles laterales y en el remate hay pinturas de la Dolorosa, San
Juan, ángeles pasionarios y el Padre Eterno. Todos del siglo XIX.
En esta capilla reposan los restos del
Cardenal Marcelo Spinola y Maestre, es un sepulcro realizado en 1912 por
Joaquín Bilbao y Martínez, aparece el difunto en actitud orante, tras él un
relieve con la Inmaculada inspirada en Murillo.
Las pinturas que se pueden admirar en
esta capilla son, la Negación de San Pedro, un cuadro tenebrista, Jacob bendice
a sus hijos del XVII ambos de autor desconocido, un Crucificado muy
deteriorado, el Traslado de Jesucristo al sepulcro, también tenebrista pero de
una mayor calidad que los anteriores, de principios del XVII, Fray Diego de
Cádiz, de 1894 y realizado por Virgilio Mattoni. El Nacimiento y la Epifanía
ambos muy deteriorados y un Ecce Homo de medio cuerpo de muy buena calidad,
atribuido a Alonso Cano.
44.-
CAPILLA DE SAN ANDRÉS
Se cierra con una reja antigua aunque
tiene añadidos de relieves en los laterales más modernos. Sobre ella se
encuentra una vidriera que representa la Última Cena realizada por Arnao de
Flandes en el año 1555. Esta capilla estaba destinada para los enterramientos
de Don Alvar Pérez de Guzmán y sus herederos, de los que se conservan cuatro
figuras yacentes, las mas antiguas de la Catedral, la del fundador, su esposa
Doña María de Ayala y dos de sus descendientes, actualmente se encuentran
adosados a los muros laterales.
El retablo neogótico cuenta en el centro
con una imagen del Sagrado Corazón de Jesús, flanqueado por otras dos sin
identificar, realizadas por Claudio Rius en Barcelona. Una escultura preside el retablo, el Cristo de la Clemencia, una obra de 1603 realizada por Juan Martínez Montañés y policromada por Francisco Pacheco.
Las pinturas que podemos en esta capilla
son, la Traslación del Arca de la Alianza y el Cántico de Débora, dos grandes
lienzos barrocos del napolitano Lucas Jordán. El Martirio de San Andrés, una
copia de otro que se expone en el Museo de Bellas Artes de Juan de Roelas.
Ótima postagem
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