13 de octubre de 2013

CORPUS CHRISTI


Los orígenes se remontan a la Edad Media, como consecuencia de la propagación de las herejías eucarísticas. Por ello, para contrarrestar estos movimientos, el Papa Urbano IV instituyó la fiesta del Cuerpo de Cristo en 1264, posteriormente, el Papa Clemente V confirma la fiesta en 1311 y seis años después lleva a cabo ciertas modificaciones, introduciendo elementos que reforzarán la celebración, cómo instituir la obligación de pasear la Sagrada Forma en procesión triunfal.
Sevilla no fue de las primeras en acoger esta celebración, pero era tal la influencia que tenía en todo el territorio, que cuando la asumió, tuvo una gran repercusión en los restantes pueblos de la península.
Como en todo tipo de acontecimientos, la celebración del Corpus en nuestra ciudad se torna en barroco, añadiéndole la solemnidad y suntuosidad y a día de hoy aún persiste. La primitiva procesión constaba de la Custodia, las parroquias, las comunidades religiosas y las reliquias e imágenes, además de carrozas engalanadas representando autos sacramentales, gigantes vestidos con ricas telas que se encarnaban la lucha del bien y el mal. Además en nuestra Catedral y delante del Santísimo bailan y cantan al ritmo de antiguas melodías, los seises, niños entre diez y catorce años que tienen el privilegio papal de poder tener las cabezas cubiertas.
 
Es una celebración seguida multitudinariamente por los sevillanos, no es exagerado pensar que la ciudad se vuelca con esta celebración, es uno de los días grandes y más tradicionales, tanto es así, que mantiene el jueves siguiente a la de la Santísima Trinidad como dia para conmemorar esta exaltación eucarística, junto con Granada y Toledo. La organiza la Hermandad Sacramental del Sagrario, en el cortejo procesional participan distintas imágenes muy ligadas a la historia de la ciudad, comenzando por los niños carráncanos, parejas de acólitos que portan hachetas y visten una indumentaria original del XVIII, aunque vienen acompañando al cortejo desde el siglo XVI, seguidos por el Guión Sacramental de la Archicofradía del Sagrario. Le siguen representaciones de hermandades y congregaciones de gloria. Tras ellas va el paso de Santa Ángela de la Cruz, fundadora de la congregación de las Hermanas de la Cruz, es el paso más reciente, del año 2009. La imagen de la Santa la realizó José Navarro Arteaga. La Hermandad de la Amargura por la estrecha relación que tiene con las Hermanas de la Cruz, es la encargada de realizar el exorno floral que luce el paso.
A continuación se sitúan las hermandades de penitencia que no son sacramentales, según el orden de salida en Semana Santa, hasta el siguiente paso, el de las Santas Justa y Rufina, patronas de Sevilla, sus imágenes están atribuidas a Pedro Duque Cornejo en el siglo XVIII. El exorno de este paso y su conducción lo realizan las hermandades de Triana, una cada año, por la especial vinculación de las Santas alfareras con ese barrio. Tras este paso van las restantes hermandades de penitencia.
A diferencia de los pasos de Semana Santa, estos van con ruedas excepto la Custodia que sí lleva costaleros. Le siguen los pasos de San Isidoro y San Leandro. Son imágenes labradas en plata en el siglo XVIII por Pedro Duque Cornejo, fueron realizadas para el altar del Corpus en la Catedral, del paso de San Isidoro se encargan los hermanos de la Hermandad de San Isidoro y el de Sal Leandro la Hermandad de la Macarena.
 
A continuación se sitúan las representaciones militares y el Pendón de San Fernando que es portado tradicionalmente por el Gobernador Militar, seguidos por el paso de San Fernando, rey conquistador de Sevilla, a continuación le siguen las representaciones de los cuerpos policiales, representaciones de Cámaras y Colegios Oficiales, Jefaturas de las distintas Ramas, Excelentísimo Ateneo de Sevilla, Reales Academias, Universidad, Cuerpo Consular, comisiones de las Audiencias Provincial y Territorial, de varias Órdenes Militares, la Junta Superior del Consejo General de Hermandades y Cofradías de Sevilla, de la Delegación Diocesana de Acción Católica y de Cáritas Diocesana.
A continuación la Inmaculada Concepción, es una escultura completa policromada debida a Alonso Martínez en el siglo XVII, su exorno lo realiza la hermandad de el Silencio. Tras la Inmaculada se sitúa la Asociación de Nuestra Señora de los Reyes y San Fernando y la Archicofradía Sacramental del Sagrario.
 
Tras ellos el Niño Jesús, procesiona bajo un baldaquino de plata, esta imagen es una obra maestra de Martínez Montañés de 1606, representa el modelo universal de esta iconografía. El exorno lo realizan los hermanos y costaleros de la Archicofradía Sacramental del Sagrario, propietaria de la imagen.
 
Después las representaciones del Seminario Diocesano, de órdenes terceras, del clero regular y de los diáconos. A continuación la Santa Espina, a este paso le acompañan representaciones del Tribunal Eclesiástico, del clero secular, de la Curia Diocesana y de la Universidad de Curas Párrocos. Precedidos de la cruz arzobispal, procesionan a continuación el coro de la Santa, Metropolitana y Patriarcal Iglesia Catedral de Sevilla y los Seises de Sevilla, con trajes eucarísticos rojos y blancos. Tras ellos, el pertiguero abre paso al Cabildo catedralicio, del que forma parte la Real Maestranza de Caballería de Sevilla cuyos miembros asisten en traje de gala.
Y por último la Custodia portando la Sagrada Forma, la célebre custodia de plata de Arfe, realizada por Juan de Arfe en 1580, llamada por algunos la Custodia Grande. Consta de cuatro cuerpos. El primero representa a la Iglesia militante, con 36 escenas de los testamentos en relieve, más los padres de la Iglesia, Santo Tomás y San Dámaso. El segundo aloja el viril rodeado de los cuatro evangelistas, con seis parejas de santos vinculados a Sevilla, más seis relieves. El tercero está dedicado a la Iglesia triunfante con el Cordero apocalíptico sobre el libro de los siete sellos, más símbolos de los evangelistas y relieves. En el cuarto va una representación de la Trinidad. Corona una figura de la Fe que sustituyó a una esfera con una cruz. Doce sacerdotes con casullas blancas le abren el camino. Tras la custodia va el arzobispo de Sevilla acompañado por un diácono y subdiácono y el deán como presbítero asistente.
 
Le siguen representaciones del Gobierno, del Ayuntamiento y la Diputación Provincial, con miembros de la Policía Local de gala, cerrando el cortejo una compañía mixta de los Ejércitos de Tierra y Aire, con escuadra y música.
Por otro lado a primera hora de la mañana es trasladado desde la Iglesia de los Terceros el Señor de la Sagrada Cena sobre la canastilla del Cristo de la Humildad y Paciencia camino del Palacio Arzobispal, llegando allí en torno a las 8:00 horas, en donde se instala en la portada de su fachada lateral.
Hasta aquí la procesión del Corpus, pero Sevilla además le aporta toda una decoración efímera, se engalanan los balcones con colchas, mantones de Manila y tapices, el suelo por donde pasa la procesión se cubre de romero y pétalos de rosa, la Plaza de San Francisco se cubre con toldos soportados sobre postes con guirnaldas y se completa con Arcos triunfales a ambos lados, además del bellísimo y completo en cuanto a su decoración, Altar presidido por la Virgen de la Hiniesta, patrona del Consistorio y situado ante la puerta del Ayuntamiento.
Otros altares a lo largo del recorrido colocan las hermandades y los escaparates de las tiendas se ven decorados con motivos alegóricos a la Festividad del Cuerpo de Cristo.
 



 

1 comentario :

  1. Magníficas fotografías! Os dejo un enlace donde podéis ver fotos antiguas de la Av. de la Constitución y la Pz. de San Francisco. Entre ellas se incluyen varias de la procesión del Corpus Christi. Espero que os guste: http://goo.gl/0k5V1. Saludos.

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