FUENTE
DE LAS RANAS
Esta fuente se inauguró en 1914, siendo
la más antigua. Es circular y está revestida en su totalidad de azulejos
cerámicos de Triana. En su perímetro se encuentran ocho ranas y en el centro
del estanque se encuentra un pato apoyado sobre una tortuga.
Las ranas surten su agua al centro y el
pato hace de surtidor principal lanzándola hacia arriba. Este modelo de fuente
es muy imitado en los patios sevillanos y en los recuerdos para el turista.
A su alrededor hay un arriate con
variedad de flores dando un toque de colorido extra a este entorno, está
protegido por una verja de hierro fundido. Los azulejos estan decorados con
motivos vegetales
Su decoración es tan golosa para los
amigos de lo ajeno, que ha tenido que restaurarse en distintas ocasiones, no
sólo por el vandalismo, sino por esos otros que gustan de tener el recuerdo en
su casa. Su entorno se complementa con dos largos y estrechos estanques
revestidos de azulejos que se surten de agua por diversos surtidores colocados
en sus lados más largos.
FUENTE
DE LOS LEONES
Es la mayor fuente de todo el parque, fue
diseñada por Forestier en 1913, aunque los leones los realizó en 1928 Manuel
Delgado Brackembury, los actuales realizados por Juan Abascal en 1957 son una
réplica de aquellos, con la azulejería ha sucedido más o menos lo mismo, los
primitivos de Ramos Rejano se sustituyeron por los actuales de Mensaque.
Los protagonistas son los cuatro leones
sedentes portando escudos, la azulejería y la gran fuente octogonal dividida en
cuartos, a cada cuarto le llega el agua de cada león, existe una pasarela que
converge en una pequeña fuente circular en el centro del polígono. Esta
glorieta se extiende por uno de sus lados a través de un estanque rectangular
con surtidores y revestido de azulejos que llega a la fuente de las Ranas.
A su alrededor se puede ver un jardín con
estructura laberíntica. Es llamativa la ausencia de bancos en todo este
espacio, pero son tantas las horas de sol que soporta, que hace imposible la
estancia lejos del frescor que da la fuente. En los aledaños de la glorieta y
bajo el monte Gurugú hay una pérgola con los únicos bancos existentes, se
corresponde con el diseño original, está cubierta con plantas trepadoras del
tipo de la australiana bignonia blanca, de hojas brillantes verde oscuro y
flores blancas y rosadas.
Aunque en la propia glorieta la sombra no
se disfruta, no quiere decir que no haya vegetación, la hay y abundante, desde
árboles originarios de Norteamérica como la catalpa, los cipreses, naranjos o
palmeras canarias y datileras. En los setos podemos ver el mirto y el bonetero.
MONTE
GURUGÚ
Este monte fue una de las atracciones de la
Exposición Iberoamericana, al ser utilizada como mirador esta elevación
artificial, su nombre viene dado por el monte que hay en Melilla. Cuenta con
una gran vegetación que prácticamente lo cubre por entero, lo que le hace
parecer natural.
En una de sus laderas hay una cascada que desemboca
en un pequeño estanque y por debajo existe un túnel que lo comunica de lado a
lado por el que pasaba un pequeño, para visitar los distintos pabellones de la
Exposición del 29. El acceso al mirador es a través de dos sinuosas rampas y
escaleras con una serie de detalles que le hacen parecer naturales. En la cima
un templete con bancos de obra para descansar y contemplar el paisaje.
En cuanto a la frondosa
vegetación existente, consta de pinos piñoneros, almeces y ruscos.
PLAZA DE AMÉRICA
Podemos extasiarnos co la vista del Pabellón Mudéjar, hoy Museo de artes y CostumbresPopulares,
el
Pabellón Real de estilo gótico, el Museo Arqueológico de estilo
renacentista, además de esas otras glorietas, todos ellos se describen
en este blog.
Sin embargo es el estanque central el que contribuye a unificar todo el entorno, ocupando el centro de todo este espacio. Está alimentado por el gran surtidor de la fuente central que da vida a peces y plantas acuáticas, su perímetro se cierra por una baranda de hierro fundido, al igual que los respaldos de los bancos de fábrica que hay a su alrededor, esa baranda se apoya en unos pilares de ladrillo visto y cada uno de ellos se decora con un gran macetón de cerámica, muy sevillana, en los que los geranios dan la nota de color complementario. Los bancos, como no podía ser de otra manera, estan forrados por azulejos, quizás en este caso no estan muy justificados, porque en días soleados y de calor, hacen imposible el sentarse, pero sin embargo, contribuyen a que este espacio central sea otra demostración de arte muy sevillano. Este espacio se encuentra más elevado que el resto de los jardines y glorietas que hay alrededor.
Delimitando todo el perímetro
se encuentra toda una serie de farolas encadenadas entre sí y en esas cadenas
cuelgan una serie de globos de cristal que a su vez también aportan su luz,
enlazando con las columnas en las que se encuentran una serie de dioses romanos
que flanquean el paso a los caminos principales.
PABELLÓN MUDÉJAR
Es de estilo neomudéjar
realizado por Aníbal González en 1914, está construido en ladrillo visto y
cuenta con toques de azulejos cerámicos. Fue el primero en construirse de
cuantos existieron en la Exposición del 29 dedicado al Arte Antiguo, hoy es
sede del Museo de Artes y Costumbres Populares desde 1972.
En este pabellón el diseño se
basa en otras edificaciones existentes, como el Real Alcázar y las Alhambra,
aunque haciendo pequeñas aportaciones del plateresco, lo que le confiere un
estilo muy propio que se repite en otras tantas edificaciones que hoy podemos
ver por la ciudad, todas ellas debidas a la genialidad de nuestro arquitecto.
En otro lado de este blog, se
describe más ampliamente este Pabellón.
MUSEO ARQUEOLÓGICO
Es de estilo neorrenacentista
siguiendo el diseño de Aníbal González, para lo cual se inspiró en el Palacio
de Monterrey de Salamanca, lo que perseguía nuestro arquitecto era representar
en los edificios de esta Plaza de América, los periodos más fecundos de nuestra
historia del arte, el Mudéjar, el Gótico y el Renacimiento.
Su construcción finaliza en
1919 y estaba destinado para ser el Pabellón de las Bellas Artes, es de planta
rectangular al que se accede por su monumental puerta, en todo el edificio se
nota el cuidado puesto en su diseño, la simetría y la armonía de todos sus
elementos. Aunque los costes de construcción se dispararon, el resultado es
bien visible, en 1941 pasa a ser Museo Arqueológico.
En otro lado de este blog, se
describe más ampliamente este Museo.
PABELLÓN REAL
Se terminó su construcción en
1916, al igual que los anteriores es obra de Aníbal González, es de estilo Gótico,
como ya se ha comentado. En principio se proyectó pensando en mostrar el
agradecimiento de la ciudad hacia la Infanta María Luisa de Orleáns, al donar
esa parte de su jardín para disfrute de los sevillanos, al final se destinó
para albergar las colecciones de arte de la Casa Real.
Es un edificio que sigue las
pautas de la arquitectura sevillana, el ladrillo visto tallado, la cerámica
blanca y azul y las cresterías. En la plazoleta que precede se dispone de
bancos de ladrillo y decorados con azulejos, las farolas con sus basamentos de
ladrillo tallado, al igual que los pedestales en los que se apoyan las seis águilas
esculpidas en piedra por José Ordóñez, sosteniendo los escudos del Reino de
España, el Señorío de Vizcaya, el Reino de Jerusalén, los Ducados de Borgoña y
la Toscana y el Señorío de Molina.
Tanto en el exterior como en
el interior la cerámica toma protagonismo, en el interior sus zócalos y en el
exterior las figuras de los heraldos de las esquinas o el escudo del frontón de
la fachada. En los dibujos de los azulejos tuvieron un papel fundamental
artistas de la talla de Gustavo Bacarisas o Pérez de Tudela y Antonio Bidón en
las esculturas.
Estos trabajos cerámicos se
ven en los zócalos de los vestíbulos de esas secciones rectangulares, en cada
uno de ellos evocaban escenas de las más acreditadas órdenes militares, como la
Orden de Calatrava, la de Montesa, la de Santiago y la Alcántara.
Al entrar en el primero de
ellos nos encontramos con la Orden de Montesa en dos excelentes lienzos
cerámicos pintados por Gustavo Bacarisas y el mosaico de su escudo de armas,
destacan en todos ellos sus magníficos artesonados.
En el siguiente nos
encontramos con la Orden de Calatrava, pintados todos ellos por el ceramista
Manuel Rodríguez y Pérez de Tudela, reproduce escenas de batallas en las que
intervinieron así cómo el escudo de la Orden o los retratos de los Reyes que
les apoyaron
Por último el dedicado a la
Orden de Santiago, pintado por Manuel de la Lastra y Liendo, Marqués de
Benamejí, escenifica distintos pasajes de la Orden a lo largo de su historia.
Durante la Exposición Iberoamericana
albergó los tesoros de la Casa Real, lienzos importantes, piezas de porcelana,
de marfil, muebles, relojes, arañas de cristal tallado, candelabros, armas,
carrozas reales, tapices y alfombras. Todo ello pertenecientes a los Reyes que
antecedieron, como el caso de Carlos V o Felipe II.
En cuanto a la vegetación que
lo rodea, se encuentran las cintas, acebuches y las jacarandas.
PABELLÓN DE DOMEQ
Este pabellón lo montó la bodega Domecq para exponer
sus productos durante la Exposición Iberoamericana, de todos aquellos dedicados
al comercio es el único que queda. Fue realizado por el arquitecto Aurelio
Gómez Millán por determinación de Don Juan Pedro Domecq, siguiendo los
principios regionalistas, el ladrillo visto y la cerámica. Es un edificio
discreto en cuanto a sus dimensiones pero muy coqueto, aún hoy día, la
decoración exterior es excelente y muy cuidada, será por ello que subsiste hoy
en día. De planta octogonal, siguiendo la pauta del Pabellón Real, a la que se
añadieron otros cuatro cuerpos en sus lados mayores y unidos entre sí por
galerías en curva con triple arquería del tipo claustral.
El acceso se realiza a través de una amplia escalera
que nos lleva a un magnifico pórtico de entrada, enmarcado por dos pares de
pilastras con capiteles corintios de ladrillo tallado, a ambos lados de este
conjunto las galerías curvas con tres arcos de medio punto sobre columnas de
mármol y balaustrada decorada con motivos vegetales.
En el vestíbulo aparecen unos bellísimos zócalos de
azulejo cerámico de Triana, pintados por el Francisco Hohenleiter con escenas
propias del campo, tanto de los viñedos cómo del toro en la dehesa. De especial
relevancia es su artesonado. Al fondo se levanta la majestuosa escalera de
doble tramo con líneas curvas por la que se accede a la segunda planta.
En esta segunda planta se encuentra el salón
principal que ocupa la sección octogonal del edificio, es una estancia muy
luminosa por las vidrieras con los escudos de la Casa Domecq que decoran los
cuatro huecos más amplios, En esta estancia se llevaba a cabo el protocolo y la
atención a las autoridades.
Desde este
salón se pasa a la terraza, aquí también dejó su huella el pintor Hohenleiter
en los frescos que decoraban la parte superior del hueco de cada una de estas
puertas, representando escenas románticas en el campo. Hoy sólo queda el de la
fachada principal.
Fue tal la aceptación que tuvo el resultado final de
este Pabellón, que Gómez Millán, cuñado de Aníbal González, fue considerado el
justo heredero de la obra del anterior al incluir en sus proyectos el ladrillo
tallado tan armoniosamente.
Los productos de la familia Domecq se exhibían en la
planta baja. El diseño del edificio seguía los fines para lo que se quería
dedicar, una magnífica distribución que permitía al visitante llegar a todo lo
expuesto.
Su inauguración tuvo una gran solemnidad, siendo el
propio Rey Alfonso XIII, la Familia Real y el Presidente del Gobierno los que
cortaron la cinta
Concluida la Exposición pasó a ser propiedad del
Estado, teniendo distintos usos, el Instituto Nacional de Meteorología ha sido
el organismo que más tiempo ha estado, actualmente lo ocupa una Asociación de
Juventudes Musicales. Esta nueva situación ha permitido que exteriormente no se
note el paso del tiempo, excepto en el cerramiento de las galerías, aunque el
interior si se ha acondicionado a los distintos usos, quizás si no se hubiesen
interesado por darle otro uso, hoy no lo podríamos disfrutar.
Parece que al fundarse la Hermandad de la Paz estuvieron interesados en convertirlo en
capilla y establecer la sede de la Hermandad en ese lugar.
FUENTE DE
LOS TOREROS
Se encuentra en un espacio circular en el que el
azulejo cerámico cobra un especial protagonismo, consta de una fuente rehundida
de cuatro gradas circulares que llegan al surtidor central, todas ellas
cubiertas por azulejos policromos y la típica baldosa de barro cocido, conocida
como alicantina, a su alrededor cuatro bancos semicirculares de fábrica
cubiertos con los consabidos azulejos en los que se ven los rostros de distintos
toreros y escenas costumbristas de la tauromaquia de los siglos XVIII al XX. El
pavimento es el ladrillo de taco de canto en espiga.
Es un espacio pequeño pero muy completo,
ya que define perfectamente la arquitectura de los patios sevillanos. A su alrededor
crecen los naranjos y eucaliptos, en los setos que la rodean aparecen los boj y
pitosporos.
GLORIETA DE COVADONGA
Es circular siendo la antesala del propio parque,
presenta en sus cuatro puntos cardinales cuatro magníficos grupos escultóricos,
con tres figuras cada uno de ellos, representando las alegorías de, el Genio,
el Trabajo, la Ciencia y el Arte, todos ellos sobre esbeltos pedestales en los
que aparecen las cartelas de lo que representan. A ambos lados de cada
escultura hay bancos de piedra.
Coullaut Valera fue uno de los escultores que
intervinieron en esta Glorieta realizando las figuras del Genio y del Arte, la
Ciencia y el Trabajo las realizó Manuel Delgado Brackembury, todas ellas
esculpidas en piedra al igual que sus pedestales.
En un principio
estaban destinados para alojarse en unas hornacinas del Palacio de Bellas
Artes, lo que hoy es el Museo Arqueológico, pero a partir de 1919 lo colocan en
el lugar que hoy vemos simbolizando el comienzo de la Reconquista,
posteriormente en 1928 se reformó añadiéndole los bancos siguiendo el diseño
del arquitecto Pedro Sánchez Núñez.
Lo que debería estar prohibido es el aparcamiento masivo en esta plazoleta y en sus aledaños, el impacto visual que supone no debería permitirse.
Lo que debería estar prohibido es el aparcamiento masivo en esta plazoleta y en sus aledaños, el impacto visual que supone no debería permitirse.
LA
PLAZA DE ESPAÑA
Este conjunto arquitectónico único en su
estilo, obra cumbre de Aníbal González, es de los monumentos más visitados por
el turismo, su espectacularidad tanto en su tamaño como en el diseño lo hacen
inevitable. Se constituyó como el edificio principal de la Exposición
Iberoamericana.
De estilo regionalista, nacido en nuestra
ciudad en el primer tercio del siglo XX, es un semicírculo de 200 metros de
diámetro, con un canal de 515 metros de longitud que lo circunda y lo divide,
el acceso entre ambas secciones se realiza a través de cuatro puentes que
cruzan ese canal. Consta de un edificio central de grandes dimensiones,
actualmente es la sede de la Fuerza Terrestre y en ambos extremos de ese
semicírculo dos Torres de 74 metros de altura delimitan el espacio, entre estas
edificaciones existen otras de menor altura, a las que se accede por unas
galerías cubiertas por unos impresionantes artesonados y abiertas a la
explanada central.
Como en toda obra regionalista la
presencia del ladrillo tallado y la cerámica es un hecho, al que hay que
añadirle para darle su monumentalidad, los ricos artesonados de madera, que le
dan un toque mudéjar, el hierro forjado y la presencia del mármol trabajado
para el pavimento bajo techo.
Hermosos diferentes tipo de estanques, quiero hacer algo pequeño en la finca de mi mamá, estoy buncando diseños caseros, con objetos reciclables, para un estanque se necesita Lona EPDM estanques? me dicen que con eso se evita mosquitos y dengues y es más facil de hacer el mantenimiento.
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