Accedemos a la Sala VII en la que nos
encontramos con los muchos discípulos y seguidores de Murillo, influenciados
por la técnica que impone, despertando los sentimientos de los fieles, como
exigía la
Contrarreforma.
En la Sala VIII se exponen
obras de Valdés Leal, que junto con Murillo suponen el culmen del barroco en la
pintura sevillana de la segunda mitad del siglo XVII. Con un estilo directo,
dramático y con gran energía y expresividad, consigue en la década de 1660 al
70, su plenitud artística al recibir múltiples encargos, muchos de los cuales
pasaron a los fondos del museo tras la desamortización. Podemos admirar una
serie sobre San Jerónimo, cómo (((*))) La Flagelación, realizado hacia 1657, procedente del
Monasterio de San Jerónimo de Buenavista, al igual que el de las Tentaciones
del Santo. De esta serie, dieciocho cuadros en total, sólo se conserva en el
museo la mitad. Narra la vida y los hechos de este Santo, con el dramatismo y
la riqueza cromática que solo un artista como Valdés Leal imprimía a su obra.
De este pintor
podemos admirar también a (((*))) Fray Alonso Fernández Pecha, Fray Hernando
de Talavera o Fray Juan de Ledesma, todos ellos realizados en 1657 y procedían
del mismo monasterio que los anteriores, el Monasterio de San Jerónimo, igual
que los siguientes, (((*))) Fray Fernando Yáñez de Figueroa, Fray
Pedro de Cabañuelas y Fray Pedro Fernández Pecha, hermano del primero.
También
podemos admirar de este mismo artista, otras dos obras que procedían del
Convento de San Agustín y que realizó en 1670 la primera y en el 72 la segunda,
(((*)))
La Asunción
de la Virgen y
La Inmaculada
Concepción, estas dos obras están catalogadas entre sus dos
mejores obras de altar, muy dinámicas, en las que expresa mucho movimiento y
logra un gran efecto de luces y sombras, como es característico en él.
Antes de pasar al siguiente espacio, no deben dejar de admirar las otras muchas obras de Valdés Leal que se exponen, cómo Los desposorios místicos de Santa Catalina pintado hacia 1685, perteneciente al Monasterio de la Cartuja de Santa María de las Cuevas, o este otro pintado hacia 1657, (((*))) La Virgen camino del Calvario con San Juan y las Marías.
Antes de pasar al siguiente espacio, no deben dejar de admirar las otras muchas obras de Valdés Leal que se exponen, cómo Los desposorios místicos de Santa Catalina pintado hacia 1685, perteneciente al Monasterio de la Cartuja de Santa María de las Cuevas, o este otro pintado hacia 1657, (((*))) La Virgen camino del Calvario con San Juan y las Marías.
No hay comentarios :
Publicar un comentario
Escribe que te ha parecido o cualquier cosa que creas oportuna.